punto. Signo de puntuación (.) cuyo uso principal es señalar gráficamente la pausa que marca el final de un enunciado —que no sea interrogativo o exclamativo—, de un párrafo o de un texto, y que implica un descenso entonativo. Se escribe sin separación de la palabra que lo precede y separado por un espacio de la palabra o el signo que lo sigue. Tras el punto que marca el fin de un enunciado o de un párrafo, la primera palabra debe escribirse siempre con inicial mayúscula.
1. Usos
lingüísticos del punto.
1.1.
Como signo que marca el final de un enunciado, un párrafo o un texto, hay que
distinguir tres tipos de punto:
a)
Si se escribe al final de un enunciado y en el mismo renglón se inicia otro
enunciado, el punto se denomina punto y seguido. En algunas zonas de
América la denominación normal es punto seguido. Si el punto y seguido
coincide con el final de una línea, se comienza a escribir en la siguiente con
el mismo margen de la línea anterior, esto es, sin blanco inicial. El punto y
seguido es, pues, el que separa los enunciados que integran un párrafo.
b)
Si se escribe al final de un párrafo y el siguiente enunciado abre un párrafo
nuevo, el punto se denomina punto y aparte. En algunas zonas de
América la denominación normal es punto aparte o punto acápite (®
acápite). La primera línea de cada párrafo debe tener un margen mayor que el
resto de las líneas que lo componen, es decir, ha de quedar sangrada. Ejemplo:
Estuvo rondando la casa varias horas, silbando
claves privadas, hasta que la proximidad del alba lo obligó a regresar. En el
cuarto de su madre, jugando con la hermanita recién nacida y con una cara que
se le caía de inocencia, encontró a José Arcadio.
Úrsula había cumplido apenas su reposo de cuarenta
días, cuando volvieron los gitanos. Eran los mismos saltimbanquis y
malabaristas que llevaron el hielo.
(GaMárquez Soledad
[Col. 1967]).
El punto y aparte es, pues, el que separa dos párrafos distintos, que suelen desarrollar, dentro de la unidad del texto, ideas o contenidos diferentes.
c)
Si se escribe al final de un escrito o de una división importante del texto, el
punto se denomina punto final (es incorrecta la denominación *punto y
final).
1.2. Se
escribe siempre punto detrás de las abreviaturas. Si la abreviatura incluye
alguna letra volada, el punto se coloca delante de esta (® abreviatura, 5d): Sra., Excmo., D.ª.
1.3.
Hasta hace unos años era frecuente el empleo del punto tras cada una de las
letras que formaban parte de una sigla (O.T.A.N.). Actualmente, las siglas se
escriben sin puntos (OTAN), salvo que formen parte de un enunciado
escrito todo él en mayúsculas (® sigla, 5a).
2. Combinación
del punto con otros signos.
2.1.
El punto se escribirá siempre detrás de las comillas, los paréntesis y las
rayas de cierre:
Dijo:
«Tú y yo hemos terminado». Tras estas palabras se marchó, dando un portazo.
(Creo que estaba muy enfadada). En la calle la esperaba Emilio —un buen amigo—.
Este, al verla llegar, sonrió.
2.2.
No debe escribirse punto tras los signos de cierre de interrogación o de
exclamación, aunque con ellos termine el enunciado. Está, pues, incorrectamente
puntuada una secuencia como la siguiente: *¿Quieres darte prisa?. ¡Vamos a llegar tarde por tu
culpa!. Pero ¿se puede saber qué estás haciendo?. Solo si tras los
signos de interrogación o de exclamación hay paréntesis o comillas de cierre,
debe colocarse el punto: Se puso a gritar como un loco (¡vaya genio que tiene
el amigo!).
Me
preguntó muy serio: «¿De veras puedo contar contigo?».
2.3.
Si el punto de una abreviatura coincide con el punto de cierre del enunciado,
solo debe escribirse un punto, nunca dos: A la boda fueron todos sus parientes: tíos, primos,
sobrinos, etc. Fueron en total ciento veinte invitados.
2.4.
Nunca se escribe otro punto tras los puntos suspensivos cuando estos cierran un
enunciado: Le
gusta todo tipo de cine: negro, histórico, de aventuras... Es un cinéfilo
empedernido.
3. Usos
no lingüísticos del punto.
3.1.
En la expresión numérica de la hora, se utiliza para separar las horas de los
minutos: 8.30
h, 12.00 h. En este uso puede alternar con los dos puntos (® dos puntos, 2.1).
3.2.
En la expresión numérica de las fechas, pueden separarse mediante puntos las
indicaciones de día, mes y año: 21.6.2000. En este uso, el punto puede
alternar con el guion y con la barra (® fecha, 2c).
3.3.
En matemáticas, el punto indica la multiplicación de dos cantidades o
expresiones, y se coloca siempre a media altura: 5 · 4 = 20; 2 · (x + y) = 30. En
este uso, se escribe entre espacios y puede alternar con el símbolo tradicional
en forma de aspa (´).
3.4.
En las expresiones numéricas escritas con cifras, la normativa internacional
establece el uso de la coma para separar la parte entera de la parte decimal: p = 3,1416 (® coma, 4). Pero también se acepta el uso
del punto, propio de países de habla inglesa y extendido en varios países
hispanoamericanos. El uso del punto como separador de la parte entera y la
decimal se ha generalizado para señalar la ubicación de las emisoras de radio
en el dial: Radio
Alcalá, 97.6; Radio Intercontinental, 104.9.
4. Usos
incorrectos del punto.
4.1.
No debe escribirse punto tras las unidades de millar en la expresión numérica
de los años, en la numeración de páginas, portales de vías urbanas y códigos
postales, ni en los números de artículos, decretos o leyes: año 1987;
página 1150; avenida de Mayo, 1370; 28010 Madrid; Real Decreto 1099/1986.
4.2.
Aunque todavía es práctica común en la expresión numérica de las cantidades
separar los millares, millones, etc., mediante un punto (o una coma en algunos
lugares de América), la norma internacional establece que se prescinda de él.
Para facilitar la lectura de estas expresiones, cuando constan de más de cuatro
cifras, se recomienda separarlas mediante espacios por grupos de tres:
52 345, 6 462 749, salvo en documentos contables,
auditorías y cualquier otro tipo de escrito en que la separación arriesgue la
seguridad. No se utiliza nunca esta separación, ni tampoco el punto (®
4.1), en la expresión numérica de los años, en la numeración de páginas,
portales de vías urbanas y códigos postales, ni en los números de artículos,
decretos o leyes.
4.3.
A diferencia de las abreviaturas, los símbolos no llevan punto (® símbolo, 2a).
4.4.
Nunca se escribe punto tras los títulos y subtítulos de libros, artículos,
capítulos, obras de arte, etc., cuando aparecen aislados y son el único texto
en su renglón:
El
llano en llamas
La
Venus del espejo
Tampoco llevan punto los nombres de autor en cubiertas, portadas,
prólogos, firmas de cartas y otros documentos, o en cualquier otra ocasión en
que aparezcan solos en un renglón.