orden. 1. En el español actual, es masculino en las acepciones siguientes: ‘colocación o disposición apropiada’ (Es muy amante del orden), ‘serie o sucesión’ (el orden alfabético), ‘categoría o nivel’ (el orden senatorial), ‘estilo arquitectónico’ (el orden corintio), ‘grupo taxonómico’ (el orden Primates), ‘sacramento del sacerdocio’ (el orden sacerdotal). Es femenino en estas otras: ‘mandato’ (Dio la orden de continuar), ‘instituto religioso, militar o civil’ (la Orden de la Merced, la Orden del Temple, la Orden de Isabel la Católica), ‘cada uno de los grados del orden sacerdotal’ (se usa normalmente en plural: las órdenes sagradas).

2. Se tilda solamente su plural esdrújulo órdenes.

3. Se escribe con mayúscula en el sentido de ‘instituto religioso, militar o civil’: la Orden de la Merced, la Orden del Temple, la Orden de Isabel la Católica.

4. En orden a. Esta locución preposicional significa, por un lado, ‘en lo tocante a, en lo que respecta a’: «La perjudicial influencia que la generalización del uso de la bicicleta ha producido en orden a las excursiones lejos de la ciudad» (MtnGaite Usos [Esp. 1987]). En el lenguaje político y administrativo se usa frecuentemente con el significado de ‘para, con el fin de’, que ya existía en el español clásico: «Cercada la cama de vecinos y parientes la decían varias cosas, todas en orden a ayudarla a bien morir» (Tirso Cigarrales [Esp. 1624]); «Al segundo operador de telefonía móvil y al segundo operador de telefonía fija les interesa sobremanera alcanzar algún tipo de colaboración en orden a potenciar sus respectivas cuotas de mercado» (Abc electr. [Esp.] 6.10.97). Con este sentido, su uso en el español moderno puede deberse también al influjo del inglés in order to.

5. Orden de busca y captura. ® busca1.

6. Orden del día. Esta locución es masculina cuando se refiere a la ‘lista ordenada de temas que se deben tratar en una reunión’: «Otro punto del orden del día fue tratar el asunto pendiente de los deportes colectivos» (Diario Hoy [Ecuad.] 7.10.97). Es femenina cuando se refiere a la ‘orden que se da cada día a los cuerpos del Ejército’: «Prueba de lo afirmado fue la felicitación que por la orden del día del Ministerio de Defensa se expresó al Brigadier General José María Rivas Forero» (Alape Paz [Col. 1985]). También es femenina en la expresión estar a la orden del día ‘estar de moda, ser muy usual’: «Los extremismos de todo tipo están a la orden del día» (Excelsior [Méx.] 18.1.97).