Es un
gas incoloro, inodoro e insípido, que puede formar un
líquido azulado o cristales azules.
Este elemento tiene tres formas alotrópicas: el oxígeno atómico (O), el oxígeno
diatómico (O2), y el ozono (O3).
- Se encuentra ampliamente distribuido por toda la naturaleza. Se obtiene por
licuefacción y destilación fraccionada del aire (en el mismo proceso se obtiene:
nitrógeno, argón, neón, kriptón y xenón), y también puede obtenerse por
electrólisis del agua.
- El oxígeno gaseoso se almacena y transporta en cilindros o botellas metálicas a
150-160 atmósferas de presión. Se usan tanques isotermos, o contenedores (en caso de
pequeñas cantidades).
- En la industria se usa para: soldadura y corte, producción de hierro y acero,
industria
química, como combustible (para cohetes), detonante,..., y en medicina (equipos de
respiración), aviación y submarinismo.
- En medicina se usa con fines terapéuticos (oxigenoterapia), pudiéndose administrar a
concentraciones y presiones relativamente bajas durante un tiempo (horas, días,...) y
requiere una vigilancia determinada. También se aplica en ciertos casos de intoxicaciones
(monóxido de carbono, cianuros, narcóticos), oxígeno hiperbárico (a altas presiones, y
concentraciones de 25-40%).
RIESGOS
- Incendio y explosión: por el uso de botellas de gases a presión y riesgos por el uso
de oxígeno licuado. Aunque no es inflamable, se comporta como un elemento esencial para
la combustión y también puede provocar el calentamiento espontáneo o la ignición de
determinados productos (trapos manchados de aceite, carbón,...). El oxígeno líquido
puede explotar si contacta con sustancias oxidables, especialmente a altas temperaturas.
- Puede haber lesiones por déficit de oxígeno (Ejemplo: en vuelos a
grandes alturas,
trabajos en minas, alcantarillas, silos,
espacios confinados, etc.) causando déficit del
suministro de oxigenación a las células necesario para la vida (hipoxia,
asfixia,...), o
bien por exceso cuando se usan aparatos de respiración con suministro de oxígeno
(lesiones pulmonares: inflamación, atelectasias, hemorragias e incluso edema agudo de
pulmón y la muerte).
PREVENCION
Una precaución muy importante es no entrar en una estancia con sospecha de déficit de
oxígeno sin equipo ni vigilancia del exterior, etc.
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