(Vélez-Málaga, 1907-Madrid, 1991) Filósofa y escritora española.

Después de cursar el bachillerato en el Instituto Nacional de Segovia,

se matriculó como alumna libre de filosofía y letras en la Universidad

Central de Madrid, donde tuvo como maestros a Manuel García

Morente, Zubiri y Ortega y Gasset. La impronta de este último dejó

una huella indeleble en toda su trayectoria intelectual, de

pensamiento inequívocamente orteguiano, lo que le valió ser

considerada por muchos su principal discípula.

En 1928 participó en varios actos públicos de la Federación

Universitaria Española, y escribió en «El Liberal» y «La Libertad». Su

primer libro, «Horizonte del liberalismo», apareció en 1930. Al año

siguiente entró como profesora ayudante en la cátedra de historia de

la filosofía de la Universidad Central y dio clases en el Instituto

Escuela (la antigua Institución Libre de Enseñanza, fundada por

Giner de los Ríos), mientras trabajaba en su tesis doctoral, «La

salvación del individuo en Spinoza». Durante la guerra civil colaboró

con la República y en Valencia se incorporó a la redacción de la

revista «Hora de España». Tras la caída de Barcelona emprendió, el

28 de enero de 1939, el camino del exilio.

En 1940 se instaló en La Habana como docente universitaria, con

frecuentes desplazamientos a México y Puerto Rico, para dar cursos

y conferencias. En 1978 se trasladó a vivir a Suiza. En 1981 recibió el

primer reconocimiento de posguerra en su país, con la concesión del

premio Príncipe de Asturias de comunicación y humanidades. Tras

regresar a España en 1984, en 1987 creó la Fundación María

Zambrano y, al año siguiente, recibió la máxima distinción de las

letras españolas, el premio Cervantes. En su amplia producción

literaria y filosófica destacan: «El hombre y lo divino» (1955),

«España, sueño y verdad» (1965), «La tumba de Antígona» (1967),

«Claros del bosque» (1977), «Dos escritos sobre el amor» (1982),

«De la Aurora» (1986), «Senderos» (1986) y «Delirio y destino»