(Guadalajara, Jalisco, 1904-íd., 1980) Escritor mexicano. Realizó

todos los estudios en su ciudad natal, graduándose como abogado

en 1929. Fue gobernador del estado de Jalisco (1952-1959),

catedrático de la filosofía y letras en la Universidad Nacional,

subsecretario de la Presidencia (1962-1964), y ministro de Educación

(1964-1970). Compaginó su amplia dedicación a la política y a la

docencia con la creación literaria, actividad ésta que cultivó

intensamente a lo largo de vida.

Tras la publicación de diversos trabajos esporádicos, a partir de 1929

comenzó a se conocido por sus colaboraciones en la prensa. Su

temática preferida era la historia de México, así como su literatura y

otros aspectos más directamente relacionados con su actividad

profesional, como los seis volúmenes de «Discursos al servicio de la

educación pública». En 1940, cuando publicó «El pensador

mexicano», que fue el inicio de una sucesión ininterrumpida de

obras: «Genio y figuras de Guadalajara» (1941), «Flor de juegos

antiguos» y «Mitos indígenas» (1942), «El contenido social de la

literatura iberoamericana» (1944), «Alfonso Gutiérrez Hermosillo y

algunos amigos» (1945), «El clima espiritual de Jalisco» (1945),

«Don Justo Sierra» (1950).

La aparición, en 1947, de «Al filo del agua», considerada su mejor

novela, supuso un punto culminante en la narrativa iberoamericana.

En esta narración, una de las más representativas e importantes de

este siglo en México, Yáñez marcó un hito en la literatura de su país:

partiendo de un hecho histórico, la Revolución de 1910, y a través de

una elaboración preciosa, consiguió crear una obra en que aúna la

doble vertiente artística y social, siendo a la vez particular y

universal. Cabe mencionar asimismo la utilización que hace en ella

del monólogo interior de Faulkner, como recurso narrativo para

introducirnos en los hechos que se desarrollan en un atrasado

pueblo de Jalisco. Posteriormente publicó «Ojerosa y pintada»

(1959), «La tierra pródiga» (1960), «Las tierras flacas» (1962),

«Tres cuentos» (1964) y «Los sentidos del aire» (1964).