- Provocan efectos tóxicos sobre las personas y tienen acciones sobre la ecología, por lo tanto deben extremarse las precauciones en su uso y conocer sus características.
- Hay que conocer la toxicidad del producto que se usa. Se mide en forma de DL-50 o Dosis Letal (mortal) para la mitad de los animales de experimentación.
- Son venenos que pueden entrar por la boca (ingestión), por los pulmones al respirar (inhalación) o por la piel al tocarlos, ya sea intacta o a través de las heridas.
Causan dermatitis en piel, y también se absorbe el producto a través de ella, causando toxicidad en el interior del organismo.
- Hay que saber también que suelen asociarse con otros pesticidas, u otras sustancias que pueden añadir efectos tóxicos o potenciarlos.
- Restricción del uso comercial a determinados productos por ser más peligrosos, usados sólo por personal con conocimientos y medios.
- Transporte en recipientes herméticos, etiquetados y resistentes, evitando su confusión con otros productos.
- Etiquetado siguiendo las indicaciones legales.
Composición, riesgos, precauciones de uso, síntomas de intoxicación, etc.
Si se hace un reenvasado a recipientes menores, estos deberán tener también las etiquetas.
- Precauciones especiales de almacenamiento en lugar aislado, evitando contacto accidental (niños), derrames, etc., en lugares fácilmente limpiables y ventilados, con prohibición de comer fumar, etc., y considerando las características particulares del producto (posibles reacciones tóxicas: las sales de cianuro reaccionan con ácido dando gas cianhídrico).
- Su aplicación se realizará por personal bien entrenado, que conozca los riesgos y la forma de uso, y estarán equipados con protección de ropa, guantes, equipo respiratorio, etc., conformes al uso del producto.
- Analizar los posibles cambios de métodos de trabajo, tiempos de exposición y otras medidas para evitar intoxicaciones, o bien peligrosos efectos acumulativos (manifestar luego bruscamente...).
- También se debe conocer la dirección de los vientos a los efectos de la dispersión, etc.
- Control ecológico evitando la contaminación del agua, o el arrastre a través de las lluvias, etc.
- Impedir el paso a la zona de otros trabajadores/as, (Ej. Recolección) hasta que se cumplan las fechas en que ya no exista peligro.
- Eliminación de vertidos y residuos (por ejemplo del lavado de las prendas de protección) a sumideros específicos, controlado. Tratamiento de los envases vacíos mediante descontaminación o bien con triturado y luego enterrados con control de residuos.
- Disponer de duchas y locales de lavado para el personal, tanto para la higiene obligada posterior al trabajo, como para situación de contacto accidental (emergencia) y control del vertido de ese agua de lavado.
Informar a los trabajadores/as de no comer o beber antes de lavarse.
- Información a los trabajadores/as, control médico de los riesgos (revisiones periódicas de las personas y las características del trabajo) y disponer botiquines con los medicamentos y medios específicos que se indican para el tóxico usado (si dispone de "antídoto", y equipo de resucitación).
Ciclodienos: Aldrín - Endrín - Dieldrín - Chordano - Heptaclor - Endosulfán
Bisclorofenilos: Kelthane - Metoxiclor - Clorobencilato - Chorfenson - Milbex - Tedión
Cocloparafinas: BHC - Lindano
Terpenos clorados: Strobane - Toxafeno
- Son tóxicos por contacto con la piel, por ingestión o por inhalación.
Después de penetrar, tienden a almacenarse en la grasa del organismo (propiedades lipotrópicas) y por lo tanto, se fijan en el sistema nervioso central (cerebro), hígado, riñones y miocardio (corazón).
Provocan lesiones funcionales en estos órganos eliminandose por la orina (detección con pruebas específicas de orina).
- Además de toxicidad, provocan irritaciones en piel y alergias.
- Puede aparecer una intoxicación aguda (brusca) accidental en la que dependiendo del tóxico, al cabo de una media hora o de unas horas (siempre menos de 12), aparecen nauseas, vómitos, diarreas, con dolor de cabeza, ataxia cerebral y parestesias ("hormigueos") y después temblores de la cara y las extremidades, llegando a convulsiones, e incluso, pérdida de consciencia y muerte (por parada respiratoria a nivel cerebral) en los casos graves.
Otros casos, sobreviven con lesiones hepáticas, renales, nerviosas (polineuritis tóxica) y alteraciones sanguíneas (diátesis hemorrágica).
- La intoxicación crónica (dosis menores repetidas) es la más frecuente a nivel profesional.
Se caracteriza por lesiones del sistema nervioso central, aparato digestivo, sistema cardiovascular y hematopoyético (formador de células de la sangre). La alteraciones cerebrales se detectan por electroencefalograma.
Son muy frecuentes las lesiones nerviosas (polineuritis) en diferentes partes del organismo (miembros, abdomen, con dolores cólicos...) con dolores y parestesias y también, las alteraciones circulatorias.
Causan lesiones en hígado, riñón (alteraciones enzimáticas) y cardiacas / vasculares.
En sangre, por aplasia medular (ataca las células formadoras de la sangre) hay una reducción de células, y por lo tanto, problemas hemorrágicos (diátesis hemorrágica a modo de púrpura).
- Algunos son sospechosos de ser cancerígenos para las personas: DDT, aldrín, dieldrín, clordane, heptaclor.
- Control de Higiene Industrial de la exposición en la fabricación.
- En agricultura: medidas de protección colectiva e individual (traje, botas, guantes, protección respiratoria...) en función del producto, y extremar la información y formación sobre los riesgos a los trabajadores/as.
- En caso de emergencia, se debe lavar inmediatamente con agua y jabón (o lavado gástrico, con carbón activado y luego eméticos a base de sales) y evacuación inmediata a tratamiento especializado y hospitalario.
Si hay intoxicación crónica, el tratamiento es sólo de los síntomas, a base de glucosa, vitamina C, tratamiento antialérgico, técnicas de rehabilitación, tratamiento del dolor... por lo tanto lo importante es la prevención primaria, evitando que puedan aparecer lesiones.
PESTICIDAS ORGANOFOSFORADOS
Son compuestos orgánicos que se utilizan ampliamente en agricultura como pesticidas contra insectos (insecticidas), ácaros (acaricidas), nematodos (nematocidas), enfermedades de las plantas (fungicidas) y maleza (herbicidas).
Unos de ellos actúan por contacto con la plaga (paratión, malatión...) y otros tienen acción sistémica (demetón, OMPA...).
Se incluyen: Paratión, metil paratión, malatión, TEPP,
OMPA, demeton, metil-demeton, ekatin, dimetoato, triclorfon, DDVP, diazinon, mevinfos, metil-azinfos, abate, actellic, amifós, antio, afugan, baytex, bromofós, butifós, valexón, gardona, dibrom, dursban, iodofenfos, imidan, kilyal, co-ral, metatión, ruelene, ronnel, sayfos, triclorometafos-, fosalone, cyanox, cidial, ciodrin.
- Riesgos de intoxicación. Puede ser por ingestión, por inhalación (al respirar los vapores o gotículas) y por absorción a través de la piel (percutánea).
Algunos tienen poco margen entre la dosis tóxica y la mortal.
- Su ventaja sobre los pesticidas halogenados (clorados) es que se degradan rápidamente en la tierra después de su uso, mientras que los otros perduraban durante largos periodos y con efecto acumulativo sobre plantas y animales.
Sin embargo, en los productos alimenticios se puede encontrar una pequeña cantidad de organofosforados.
Pueden causar toxicidad de forma aguda (accidental) o bien crónica por exposición a pequeñas cantidades durante cierto tiempo (profesional, o a través de alimentos, agua...).
- Para conocer su toxicidad se establece la Dosis Letal DL-50 que es la que sería capaz de matar al 50% de los animales en experimentación.
De este modo, se han establecido tres categorías de toxicidad: las sustancias extremadamente tóxicas son aquellas cuya DL-50 es inferior a 50 mg por Kg de peso corporal como: TEPP, HETP, OMPA, timet, demetón, paratión, metil paratión, mevinphos, gutión, disulfoton, nuvacron, ciodrin...
Las altamente tóxicas tienen una DL-50 de 50 a 100 mg/kg y las de toxicidad moderada de 200 a 1.000 y las ligeras superior a 1.000 mg/kg peso.
También se clasifican según su riesgo de efectos acumulativos.
- Una vez que se absorben por el organismo, la forma en que actúan es inhibiendo una enzima llamada colinesterasa en la células, que es necesaria para la fisiología y vida del organismo. Precisamente en esta característica se basa el diagnóstico específico de laboratorio (disminución de la colinesterasa en sangre) además de las alteraciones de la sangre entre otros datos.
- En la intoxicación aguda (a las pocas horas) aparece primero ansiedad, náuseas, vómitos, diarrea, visión borrosa... y luego si la intoxicación es moderada continua con somnolencia, confusión, temblores y pérdida de conciencia, pero si es intensa llegará a convulsiones y al coma. El fallecimiento tiene lugar por parálisis respiratoria.
Provocan también edema cerebral, de pulmón, contractura de intestinos y hemorragias internas...
- En caso de intoxicación crónica (exposición profesional mantenida) causa: dolor de cabeza, fatiga, pérdida de memoria, debilidad, alteraciones del sueño, pérdida de apetito, pérdida del sentido de la orientación, temblores, trastornos psíquicos y algunas veces lesiones de nervios (neuritis) e incluso parálisis.
Afectan también al hígado, riñón y otros órganos.
- Sustitución por otros de menor toxicidad.
- Almacenamiento en recipiente cerrado y bien etiquetado.
- Uso de ropa protectora y equipos.
No fumar ni comer durante el trabajo.
Disponer de duchas y lugares de lavado.
Cuando se usan equipos portátiles (tipo mochila) evitar toda posibilidad de contacto.
Utilizar equipos completos de protección personal (tipo mono con guantes, botas, gorro, todo ello de cloruro de polivinilo o similar y equipo respiratorio con filtro de máscara de carbón activado).
Estos equipos se guardarán separados de la ropa personal.
- Precauciones con las direcciones del viento cuando se aplican desde aviones, alejados de zona poblacional y prohibiendo el acceso a la zona tratada.
- Se usan por la mañana y por la noche.
Prohibido durante las horas cálidas del día.
Los trabajadores/as tienen limitado el trabajo con estos productos a 4 horas diarias, pudiendo realizar otras tareas.
- Control médico de enfermedades previas que se pudieran agravar con los síntomas de intoxicación citados y detección precoz si surgen anomalías.
Prohibición de estos trabajos a menores, a embarazadas y a mujeres en lactancia.
- Disponer en el botiquín de urgencias de :
Solución de amoniaco al 5-10% o de coramina al 2-5% para, en caso de contactos accidentales, lavar utilizando algodón (sin frotar la piel), y luego lavar con agua.
Bicarbonato sódico al 2% con dos o tres tabletas trituradas de carbón activo.
En ingestiones accidentales, conviene hacer beber agua y vomitar, y luego beber una solución de bicarbonato sódico al 2% con dos o tres tabletas trituradas de carbón activo.
Disponer también de atropina (sulfato de atropina inyectable subcutánea o intramuscular) para usarlo como antídoto si los síntomas son más intensos, y de equipo de respiración artificial si se observa parada respiratoria.
De este modo se va ganando tiempo en el traslado urgente al auxilio médico.
Pesticidas OIT: Clasificación - Control biológico
COMUNIDAD VALENCIANA
(PDF)Carnet manipulador básico
Carnet manipulador cualificado
Almacenamiento de pesticidas. | Clasificación. | Reconocimiento médico. | |||
Fertilidad hombres. | Organofosforados 1. | Organofosforados 2. |
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