Esta "anomalía" en la representación en la
empresa tiene su origen en las diferencias de planteamiento e implantación durante
los últimos años del franquismo y primeros de la transición, de los que después
serían los dos sindicatos mayoritarios.
Comisiones Obreras era el
movimiento sindical predominante, y con implantación en las empresas mediante la
infiltración en el Sindicato Vertical franquista.
La Unión General de
Trabajadores era un sindicato de filiación socialista sin apenas presencia real desde la
República, y con un modelo tradicional de afiliación y secciones sindicales.
Para satisfacer a ambas
corrientes se optó por una solución salomónica de doble vía, que hace que en las
grandes empresas exista una múltiple representación; pués hay sectores donde hay otros
sindicatos con representatividad suficiente para tener sección sindical, con delegados
sindicales liberados (de trabajar). |