t. 1. Vigésima tercera letra del abecedario español y vigésima del orden latino internacional. Su nombre es femenino: (la) te; su plural es tes.
2. Con esta letra se representa en la escritura el sonido consonántico dental oclusivo sordo /t/.
3. En el español de España, en posición final de sílaba, y especialmente si la sílaba es átona, en la pronunciación espontánea la t suena como una /d/ fricativa: [ádlas] por atlas, [rrídmo] por ritmo, [admósfera] por atmósfera, [ednolojía] por etnología. (Debe evitarse la pronunciación de esta t como /z/: *[rrízmo] por ritmo). En Hispanoamérica, por el contrario, se articula una verdadera /t/ en esta posición.
4. En posición final de sílaba precedida de s, la t no suele pronunciarse: [ísmo] por istmo (® istmo). Puesto que la t del prefijo latino post- es de difícil articulación, es preferible utilizar la variante pos-, que suele ser también la de mayor frecuencia de uso. Así pues, formas como posdata o posoperatorio son preferibles a postdata y postoperatorio (® pos-).
5. No es propio del sistema español que la t aparezca en posición final de palabra; no obstante se han incorporado a nuestro idioma numerosos latinismos y extranjerismos que se escriben con -t final: déficit, superávit, robot, boicot, argot, salacot, fuet, etc. Muchos de ellos se han adaptado al español suprimiendo la -t: bufé (del fr. buffet), chalé (del fr. chalet), chevió (del ingl. Cheviot); o añadiendo vocales de apoyo: pailebote (del ingl. pailebot), voltio (del ingl. volt), fagote (del fr. fagot).
6. Para la división silábica del grupo -tl-, ® guion2 o guión, 2.6d.