Oficio o disciplina que consiste en arreglar o modificar el pelo
para realzar la belleza, con fines prácticos o para indicar la categoría social.
El proceso puede implicar cortar, entresacar, rizar, alisar, trenzar, aclarar, oscurecer,
teñir, engrasar o añadir cabellos falsos (como pelucas o postizos) o adornos.
RIESGOS
- Son trabajos realizados en posición de pie, y con movimientos repetitivos que
causan lesiones en los miembros superiores (manos y brazos), en columna vertebral, y
problemas circulatorios (varices) en miembros inferiores.
- Suelen tener horarios irregulares, con periodos "punta" de trabajo a demanda,
que causa fatiga nerviosa añadida.
- Uso de múltiples productos de belleza: decolorante, tintes, etc. (COSMÉTICOS)
conteniendo agua oxigenada, amoniaco y tinturas en variadas composiciones. Se añaden los
componentes de los champús, uso de depilatorios, maquillajes, barnices de uñas, etc.
Todos ello pueden combinar diferentes efectos sensibilizantes en la piel y causar
dermatitis y eczema. Aparece sobre todo eczema de contacto, dermatitis tóxica y
dermatitis alcalina. La alergias están relacionadas con la p-fenilenodiamina que se
encuentra en productos como el barniz de uñas, o con el uso de determinados champús y
cosméticos.
- Los trastornos digestivos están relacionados con las irregularidades horarias de las
pausas.
- Surgen irritaciones características de los espacios entre los dedos y en las uñas
debidas a partículas de pelo.
- Riesgo eléctrico por aparatos defectuosos.
- Riesgo respiratorio al inhalar lacas y otros aerosoles. Es llamado
"Thesaurosis".
En otros casos, aparece asma debida a los agentes decolorantes de persulfato.
- La posible relación entre el uso de tintes y efectos mutagénicos o cancerígenos está
en estudio (sobre todo de cáncer de vías urinarias, que aparentemente existe con mayor
incidencia en peluqueros).
PREVENCIÓN
- Adecuado diseño del local en la distribución del mobiliario, iluminación y
ventilación.
Suelos fácilmente lavables, medios de desinfección del equipo, cubos de basuras con
tapas, equipamiento de toallas suficiente, buena revisión de aparatos eléctricos, etc.
- Revisar la composición de los productos cosméticos evitando el uso de los que
contengan: arsénico, antimonio, bario, plomo, cadmio, mercurio, selenio, talio, cromo,
anilina y derivados, tetracloruro de carbono, etc. o con sustancias inflamables: éter
etílico, acetona, benceno, gasolina, nitrobenzeno, hidrocarburos clorados, alcohol
metílico, etc.
El ácido tioglicólico debe ser usado en permanentes de ondulaciones en dilución mayor
del 7,5% y a pH 8 como máximo (Suiza).
- Es importante el uso de protección de las manos de los peluqueros/as.
- Revisión médica: observando si aparecen lesiones de articulaciones y de la piel, así
como detectar problemas de varices y de sensibilizaciones (alergias).