DIESEL SUBTERRANEO
Se trata del uso de
motores diesel móviles en la minas (subterráneas y superficiales), que se usan
reemplazando frecuentemente la maquinaria eléctrica.
- La contaminación por los gases de escape del motor, depende de la mezcla combustible- aire, de la temperatura de combustión, y de la sincronización de la inyección. Es importante el diseño del motor y un cuidadoso ajuste y buen mantenimiento para reducir los humos. Si para reducir los humos se usan aditivos, debería tener en cuenta su toxicidad. Exiten métodos técnicos para conseguir estas reducciones (uso de un quemador postcatalítico....
Según las autoridades mineras de diferentes países (CECA, Estados Unidos, Canadá,...) es preferible utilizar una atmósfera limpia, a pesar de un ligero aumento del consumo de combustible.
- El peligro de incendio y explosión se reduce con sistemas técnicos de refrigeración del motor (métodos de inyección de agua para refrigerar los tubos de escapes,...), y por ello deberá haber suficiente agua disponible por si hay que reponer durante el turno de trabajo.
- También para un correcto funcionamiento se requiere el buen mantenimiento de otros dispositivos, como el filtro de aire, para un funcionamiento exento de polvo.
- Para comprobar que no se superan los límites de exposición, es muy importante realizar tomas de muestras periódicamente, sobre todo basándose en la concentración ambiental de monóxido de carbono (y luego completar con mediciones periódicas del resto de los gases).
- Para asegurar que se cumple los requisitos de seguridad, existen requisitos de homologación de los motores diesel sobre:
· Composición de los gases de escape (en ppm)
· Refrigeración de los gases de escape por refrigeración de agua (en el colector o en el depurador)
· Limpieza de estos gases por medio de un depurador de gases, o por catalizadores.
Y en el caso de riesgos por grisú:
· Respetar las temperaturas máximas en las superficies del motor y accesorios.
· Supresores de llama (en el lado de admisión) y chispas (en el lado del escape del motor).
· Montaje del motor con suficiente número de juntas de calidad adecuada.
· Resistencia del motor a una presión de ensayo (aplicada entre los supresores de llama).
Los documentos de homologación deben ser suficientemente completos, y deben aportar las instrucciones normalizadas (establecidas por el Comité de trabajo conjunto de la UE y la Naciones Unidas).
- Debe disponerse de personal supervisor de mantenimiento y funcionamiento de las máquinas. Por ejemplo para preservar las condiciones de:
· No dejar agotar el depósito de combustible.
· Frecuente limpieza o cambio de filtro de polvo.
· Revisiones de los niveles del aceite lubricante del motor, y cambios de filtro de aceite.
· Comprobación del agua de refrigeración y del estado del radiador.
· Revisión del acondicionador del escape.
· Puesta a punto y ajuste (importante en los diesel subterráneos).
· Comprobación del dispositivo del estrangulardor de aire de emergencia (1 vez a la semana,..)
· Comprobación de gases tóxicos ambientales en cada turno de trabajo.
·Almacenamiento y manipulación de combustibles conforme a normativas. (Existen normas especiales respecto al combustible, para prevención de incendios, derrames y otros peligros)
El Comité conjunto de la UE/Naciones Unidas ha publicado tales especificaciones técnicas para ensayos oficiales y de control de producción (en el anexo de las normas para equipos y vehículos a motor de 1958, revisada en 1980).
- Cada mina deberá tener su propio plan de emergencias y evacuación.
- Los principales problemas para al salud se deben al exceso de ruido y la contaminación atmosférica, por las emisiones de los gases de escape, además del peligro de incendio y explosión (en los equipos subterráneos).
- Los gases de escape de un motor diesel pueden ser: gases tóxicos (que incluyen el monóxido de carbono y los óxidos de nitrógeno), humos y vapores (formados por los hidrocarburos sin quemar), y gases irritantes (comprenden hidrocarburos parcialmente quemados, aldehídos y óxidos de azufre).
Bajo tierra, el mayor riesgo para la salud se debe fundamentalmente al monóxido de carbono y a los óxidos de nitrógeno, y en menor medida al dióxido de carbono.
La producción de contaminantes debe limitarse desde el mismo diseño del motor. Además, la composición de los gases depende de las condiciones de funcionamiento, del estado de conservación y de la forma en que se maneja el motor. Por lo tanto son factores a revisar y considerar en cuanto la prevención.
- Existen normas y requisitos legales sobre las limitaciones del uso y de la exposición a los gases contaminantes. Las reducciones de la exposición radican, en principio, en los modelos de diseño (sistema de inyección, de quemado de combustible, etc.). De esta forma la UE emitió los valores límites para las emisiones de gases de estos vehículos (desde 1958, y revisados en 1978), sobre monóxido de carbono, hidrocarburos, óxidos de nitrógeno y humos; y se siguen investigando los efectos nocivos en los países perteneciente al Consejo para al Ayuda Económica Mutua (CAME).
Para la utilización segura de los motores diesel, las normativas (o legislación) suelen indicar unos requisitos básicos: proponer un límite de exposición en el lugar de trabajo, un caudal de ventilación mínimo para cada tipo de vehículo motor, y un caudal mínimo en función de la potencia nominal del motor y de la concentración de gases nocivos en el escape, sin diluir.
Las normas sobre la cantidad de aire necesaria para dilución es diferente y varían de unos países a otros (Ejemplo: de 0,67 a 7,1 m3/minuto/BHP,...), pero son normas que se aplican a todo tipo de minas independientemente del sistema de ventilación que se use.